Así lo ha confirmado el informe del Tribunal de Cuentas que ha analizado la ejecución del Plan E y ha detectado engaños evidentes, especialmente en la contratación de parados. En Valladolid ha puesto de manifiesto que en la urbanización de la calle Caamaño, en el barrio de Las Delicias, se iban a contratar a 22 parados, y no se contrató a ninguno. Lo mismo sucedió en el alumbrado de varias calles céntricas y en la reforma del antiguo matadero para convertirlo en el Espacio Joven. Cuando el gobierno del PSOE planteó este plan ya dijimos que ni era socialista ni iba a crear empleo. Muchos de los famosos carteles del Plan E distribuidos por toda España se llenaron de pintadas con las palabra "engaño" manifestando así la auténtica esencia del Plan: un engaño que sólo benefició a las empresas adjudicatarias.
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