Con estos ingresos tienen que afrontar tanto los gastos regulares (hipoteca o alquiler, además de recibos) como los de manutención. Son unas cifras, a juicio de Jesús García Gallo –Director diocesano de de Cáritas Valladolid–, de un crecimiento «sostenido» en los últimos meses de un sector de la población que antes no iba a las dependencias de la organización no gubernamental y que ahora toma esta ayuda económica como «imprescindible» para sobrevivir. Unas cuantías, además, que crecen sustancialmente porque la solidaridad familiar también va terminando dado que las situaciones
de empobrecimiento crecen.
de empobrecimiento crecen.